MISA DEL GALLO
24 DE DICIEMBRE
LAS JORNADITAS DE LA VIRGEN
Nueve días caminando con María y José hacia Belén
VIII Jornada. 23 de diciembre. La pobreza
Buscamos posada: puertas cerradas y miradas distraídas. El Niño sigue viniendo.
—No pasa nada —dice María—. Dios no necesita grandes lugares.
«No había sitio para ellos en la posada» (Lc 2,7).
Oración
Jesús pobre, quita de mí la soberbia de elegir dónde
quieres nacer.
Jornada vocacional Clariana
En este martes rezaremos a Santa Mª Virgen,
modelo de la Vida Contemplativa
por las vocaciones a este monasterio
Ø Adoración Diurna: Turnos de Adoración al Santísimo.
Ø Celebración de la Santa Misa
Ø Rezamos por las necesidades de todo el mundo.
Ø Trabajo: costura y bordados
Ø Estudio
Ø Vida Fraterna: el don de las hermanas.
Ø Recreación: Alegría.
Ø Felicidad y Paz…
Si sientes la llamada de Dios: responde a esa llamada
con la entrega generosa de tu vida.
¡Dios te quiere a aquí!
Ponte en contacto con nosotras.
EVANGELIO Y REFLEXIÓN DIARIA.
FRAY MANUEL DÍAZ BUIZA, ofm
Juan: ¡Dios se compadece!
23 diciembre 2025
Lectura del santo evangelio según san Lucas (1,57-66)
A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y se alegraban con ella.
A los ocho días vinieron a circuncidar al
niño, y querían llamarlo Zacarías, como su padre; pero la madre intervino
diciendo: «¡No! Se va a llamar Juan».
Y le dijeron: «Ninguno de tus
parientes se llama así».
Entonces preguntaban por señas al padre
cómo quería que se llamase. Él pidió una tablilla y escribió: «Juan es su
nombre». Y todos se quedaron maravillados.
Inmediatamente se le soltó la boca y
la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios.
Los vecinos quedaron sobrecogidos, y se
comentaban todos estos hechos por toda la montaña de Judea. Y todos los que los
oían reflexionaban diciendo:
«Pues ¿qué será este niño?»
Porque la mano del Señor estaba con él.
Palabra del Señor
A los ocho días de nacer, Isabel y Zacarías, presentaron a su hijo en el
templo para circuncidarlo y ponerle un nombre. Según la tradición, la
imposición del nombre es privilegio del padre que para perpetuar su
nombre, asegurar el linaje y ser sacerdote como él, se llamaría igual que su
padre: Zacarías. Su nombre garantizaría su porvenir.
En cambio, ¡se llamará Juan!
El mutismo de Zacarias se había convertido poco a poco en admiración, meditaba las palabras recibidas en el silencio de su corazón: "le pondrás por nombre: Juan, es decir, ¡Dios se compadece!
Su nombre ya no significará un linaje, sino un futuro inesperado, llamado por la gracia llevará el nombre de la gracia. Dios no es nada del pasado sino que abre futuro. Con Juan nace un mundo nuevo, será el precursor de la gracia, que invitará a los hombres a superarse para ir al encuentro de la aventura. Viene Dios, "viene a visitarnos el Sol que nace de lo alto" para renovar todas las cosas.
Que seamos capaces en ver en este niño-Dios la aurora de un futuro nuevo. Que en El Niño-Dios te encuentres con lo mejor de Dios: su amor, su ternura y su firme propósito de hacerte feliz, pues para eso ha nacido Dios para recuperar el camino perdido, el camino de vuelta a casa, de vuelta a Dios. El camino de la verdadera felicidad.
¡Paz y Bien!